La Gala Zafiro, gran música entre grandes amigos
Como una reunión de amigos. De viejos y nuevos amigos. Algo así es en parte la Gala Zafiro con la que Ópera de Puerto Rico celebra hoy sábado su cuadragésimo quinto aniversario, concierto que comenzará a las 8 de la noche en la Sala Sinfónica Pablo Casals del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré.
Además de eso -de una reunión de queridos nuevos y viejos amigos- esta Gala es también una suerte de tributo a esa gesta de cuatro décadas y media en la que Ópera de Puerto Rico ha sido, no solo responsable de la presentación en nuestro país de las más grandes estrellas locales e internacionales de este arte, sino también una invaluable propulsora del talento joven de nuestro país, como bien lo demuestra el elenco convocado para esta celebración que reúne a los ya estelares Yalí-Marie Williams, Rafael Dávila y Ricardo Lugo, junto a un grupo de cantantes jóvenes que ya comienzan a cincelar una trayectoria promisoria como solistas como es el caso de Anaïs Mejías, Patricia Vásquez, José Daniel Mojica, César Méndez, Patricia Martínez y Alejandro Márquez. También participarán un coro de medio centenar de voces -preparado por la profesora Jo-Anne Herrero- y el Coro de Niños de San Juan, todos ellos acompañados por la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico, dirigida por el maestro Roselín Pabón.
Aunque se trata de un concierto integrado por arias de las óperas más hermosas y conocidas del repertorio -con un homenaje al coro como parte fundamental de todas las producciones de OPR- Gilberto Valenzuela se encargará de diseñar un movimiento de escena minimalista para la interacción de los cantantes.
“Cuando fundamos Ópera de Puerto Rico hace 45 años este proyecto se convirtió en una misión de vida”, dice Howie de Jesús, uno de los emblemáticos miembros de esta compañía. “Los logros artísticos han sido extraordinarios. Fuimos los primeros en presentar en Puerto Rico a figuras como Plácido Domingo, Grace Brumbry, Luciano Pavarotti. Joan Sutherland, Renata Scotto, Alfredo Kraus y José Carreras, entre una lista muy extensa de grandes estrellas. Para gran orgullo nuestro también hemos sido parte de las carreras de artistas locales estelares como Justino Díaz, Margarita Castro, Ana María Martínez, Antonio Barasorda, César Hernández, Hilda Ramos, Rosa María Baker, Ricardo Lugo y Yalí-Marie Williams, entre muchos más, así como de tantos jóvenes que, al igual que los que participan en esta gala, representan lo mejor de nuestro arte lírico”.
Aunque es una gala, no se intimide, es solo el nombre por el significado de la ocasión. No tiene que ir de etiqueta o con traje largo, ni tampoco sacar sus joyas o pedir algunas prestadas a la madre, a la abuela o a la tía. Sencillo y cómodo puede ser el atuendo. Igual la pasará estupendamente
Para Yalí-Marie Williams -quien en octubre del año próximo hará realidad su sueño de cantar el papel protagónico en Tosca, de Puccini, junto a Rafi Dávila, también con Ópera de Puerto Rico- esta compañía ha sido su “bendición”. “Las oportunidades que me han brindado como profesional y como persona son infinitas”, afirma. “Las amistades que comenzaron allí son ahora mi familia. El montaje de una ópera es sumamente costoso y cada año los fajones miembros de su Junta de Directores, bajo la batuta de Raquel Dulzaides, se esfuerzan tanto para ofrecer al país obras con elencos de artistas puertorriqueños, dándonos la oportunidad de compartir con nuestra gente ese talento que tanto hay en la Isla. Mi más profundo agradecimiento por creer en nosotros”.
Por su parte, Rafael Dávila señala que “Ópera de Puerto Rico me abrió las puertas hace ya dos décadas en una versión de concierto de La Traviata, precisamente junto a Yalí-Marie Williams”. “En aquellos inicios el maestro Pabón también fue muy importante porque me dio la oportunidad de hacer mis primeros solos con la Orquesta Sinfónica”, recuerda. “Durante todos estos años Ópera de Puerto Rico me ha invitado a cantar varios papeles protagónicos y claro que estoy más que agradecido y feliz por ser parte de esta gala”.
“Ópera de Puerto Rico me dio el primer papel profesional que canté en mi vida.. fue el conde de Ceprano, en un Rigoletto que hice junto a Justino Díaz a finales de los 90”, comenta Ricardo Lugo. “Los amigos de esta querida compañía fueron los primeros en creer en mí y los que me permitieron demostrar lo que sabía hacer. Después de eso me han brindado varias oportunidades más. Estoy muy agradecido a todas las compañías de nuestra Isla, en especial a Ópera de Puerto Rico, que siempre toma muy en cuenta a los cantantes de aquí y les da la oportunidad de probarse”.
Para el maestro Roselín Pabón -quien hace apenas unos días celebró su septuagésimo cumpleaños- la invitación para dirigir la OSPR en esta gala “es un gran privilegio”. “También es motivo de mucho placer, de un gran regocijo”, añade. “Se trata de una compañía emblemática para la historia de la ópera en nuestro país, no solo por sus grandes producciones y las grandes estrellas que ha presentado, sino también como un taller para los cantantes jóvenes de nuestra Isla. Ópera de Puerto Rico me ha dado muchas oportunidades muy importantes en mi carrera y es un honor regresar ahora para esta celebración con estos cantantes que ya antes han trabajado conmigo. Estoy convencido de que quienes estamos en posición de ayudar, tenemos que hacerlo, sobre todo cuando se trata de jóvenes que comienzan a abrirse paso”.
Anaïs Mejías dice que nuca antes había cantado con OPR pero que era uno de sus sueños. “Siempre que he podido he asistido a todas sus producciones y siempre pensaba ‘yo quiero contar con ellos’, en especial desde que vi ‘Puro Puccini’. Me impresionó tanto”. apunta. “Ahora tengo esta oportunidad y me siento feliz por cantar en sus cuarenta y cinco año y se parte de su historia”.
Al barítono César Méndez ser parte del elenco de esta gala le “hace mucha ilusión”. “Hice mi debut con Ópera de Puerto Rico en una Traviata y estar ahora de regreso me entusiasma mucho”, asevera. “Es una fiesta y una gran oportunidad de estar en el escenario con tantos buenos amigos”.
Patricia Vásquez señala que su debut profesional fue con Ópera de Puerto Rico -como Flora, en Traviata- y que esa oportunidad “fue muy importante por el apoyo y por la confianza que pusieron en mí”. “Desde entonces he estado cantando con ellos y me siento muy afortunada de ser parte de esto”, asevera “Es un privilegio cantar con Rafi, Yalí y Ricardo, que tanto prestigio tienen, así como con mis compañeros de generación”.
“Es clave para mi crecimiento personal y como artista cantar en esta ocasión con Ópera de Puerto Rico”, comenta José Daniel Mojica. “Es un honor estar al lado de cantantes de tanta experiencia y me da un gusto inmenso estar de regreso a mi país para demostrar todo lo que he aprendido recientemente”.
Por su parte, Patricia Martínez califica su participación en el programa de esta noche como “un privilegio y un regalo de vida”. “Estoy muy contenta por estar en esta celebración”, asevera. “Voy a cantar un pequeño dúo con Rafi Dávila y esto ya de por sí es un honor inmenso para mí”.
En su debut como cantante de ópera, Alejandro Márquez Ramos -hijo de la soprano Hilda Ramos y del bajo John Márquez, quien cantará con el coro- dice que esta es una “oportunidad de ensueño que agradezco profundamente a Ópera de Puerto Rico”. “Nunca pensé que este honor me llegaría en estos momentos y para mí es algo muy especial”, comenta. “Me siento inmensamente comprometido, no solamente con la compañía y mis compañeros de elenco, sino también con mis padres y el público”.
Aunque es una gala, no se intimide, es solo el nombre por el significado de la ocasión. No tiene que ir de etiqueta o con traje largo, ni tampoco sacar sus joyas o pedir algunas prestadas a la madre, a la abuela o a la tía. Sencillo y cómodo puede ser el atuendo. Igual la pasará estupendamente. Los boletos están a la venta en la taquilla del CBA Luis A. Ferré, (787) 620-4444, y en Ticket Center, (787) 792-5000.
(Una versión más corta de este artículo fue publicada en la edición impresa de El Nuevo Día del 14 de mayo de 2016)
