Viva la fuerza de "Star Wars" con la Sinfónica
Pocos fenómenos artísticos y culturales encapsulan de una manera tan vasta e inclusiva los recuerdos y vivencias de -al menos- cuatro generaciones como lo ha hecho desde 1977 la saga fílmica de Star Wars, realidad cuyo poder evocativo está entrañablemente vinculado a las memorables bandas sonoras escritas para los siete largometrajes por el maestro John Williams.
La monumental resonancia emotiva de esta constelación musical que sirvió también para uno de los episodios más exitosos de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico -con siete conciertos entre octubre y diciembre pasados y alrededor de diez mil espectadores- regresa nuevamente a la Sala Sinfónica Pablo Casals de la mano de nuestra máxima institución musical bajo la batuta del maestro Rafael Enrique Irizarry, su director asociado, con dos conciertos programados para este viernes y sábado, a partir de las 7 de la noche.
Según explica el maestro Irizarry -admirador incondicional de la saga y del maestro Williams- luego de los conciertos del año pasado “se hicieron disponibles varios extractos de la banda sonora de la película más reciente”. “Esos segmentos los hemos integrado al repertorio para estos dos programas, con la colaboración de José Nieves, líder de la Legión Garrison 501, cuyos miembros usan las indumentarias de los personajes de esta saga fílmica”, agrega. “Hemos añadido también otros recursos visuales y cambiado el formato. Me atrevería a decir que hemos renovado la propuesta. Claro, es inevitable que se repita alguna música pero estamos haciendo un acercamiento distinto. Estos conciertos seguirán teniendo el entretenimiento como parte de la propuesta, pero nos ceñimos a lo que hicimos en los primeros siete programas: en el centro del escenario estará la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico”.
El público viene porque tiene fe en lo que ve y escucha en el escenario y esto contradice a quienes vociferan que estamos lacerando el nombre de don Pablo Casals al hacer música de "Star Wars”
Mtro. Rafael Enrique Irizarry
La oferta de estas dos veladas musicales está consagrada de manera exclusiva a las bandas sonoras de todos los filmes de Star Wars, con énfasis en las nuevas adiciones del episodio VII. “Es una selección de extractos muy bien hecha por los responsables de la misma y no me cabe la menor duda de que habrá un buen número de personas que a duras penas podrán contener la emoción al escuchar algunos de esos pasajes. Eso nos ha sucedido a muchos de los maestros en la orquesta y a este servidor”.
El director asociado de la OSPR -y creador, productor y anfitrión del programa radial Banda Sonora, que se transmite a través de Allegro 91.3- señala que el inmenso éxito de estos conciertos que han llenado totalmente la Sala Sinfónica en siete ocasiones se debe a varias razones, entre ellas “el momento de efervescencia por la llegada de esta entrega más reciente, el episodio VII, con un éxito de taquilla que ni el propio director anticipó”. “Los que hemos seguido la saga de Star Wars por los últimos caso 40 años llegamos a pensar que esto había terminado con el estreno del episodio III, pero ya vemos que no ha sido así y que ha habido un gran esmero por ser inclusivo y atraer una nueva generación, con un éxito rotundo”, explica.
“De la misma manera -agrega- la calidad de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico ha experimentado un crecimiento extraordinario. El sonido ha sido recalibrado y depurado por los años de trabajo en la Sala Sinfónica, que tiene una acústica de calibre mundial que ha avivado la atención del público, que sabe que va a esa sala a escuchar una orquesta que suena formidable. Esto nos convence de que estamos presentando un producto de calidad y me atrevo a afirmar que si el compositor entrase a la sala y nos escuchara ahora, dibujaría un rostro de satisfacción y pensaría: ‘¡Caramba, que bien toca esta gente mi música!’, y en esto tiene un gran crédito, sin duda, el maestro Maximiano Valdés, quien también ha insistido en que debemos transformar la manera como nos acercamos a nuestro público, con una mirada más amplia e inclusiva”.
Asimismo, el maestro Irizarry destaca que la orquesta “ha entendido de manera cabal la responsabilidad que entrañan estos conciertos y los asume con una seriedad y un compromiso absolutos para presentarlos al más alto nivel posible, no solo por respeto al compositor, sino también al público, que tanto nos ha apoyado siempre, en especial con los conciertos que han sido a beneficio del plan de pensiones de nuestros maestros”. “El público viene porque tiene fe en lo que ve y escucha en el escenario y esto contradice a quienes vociferan que estamos lacerando el nombre de don Pablo Casals al hacer música de Star Wars”, señala.
El maestro Irizarry menciona a Joseph Campbell y su monografía de 1949 The Hero with a Thousand Faces, en la que plantea que “la historia siempre se repite”. “Esto fue puesto en contexto por la publicación del libro The World According to Star Wars, de Cass R. Susstein”, explica. “Cambia el número de protagonistas y la manera de narrar, pero en esencia todas las historias son las mismas, tanto para el judeo-cristianismo como para las tradiciones paganas. Star Wars nos pone de frente a las mismas circunstancias que consolidó Richard Wagner en su Anillo del Nibelungo a finales del siglo XIX y con las mismas que consolidó JRR Tolkien cuando consolidó la historia de El Señor de los Anillos. Todas tienen muchos rasgos en común y esto no es coincidencia. La lectura filosófica de Star Wars nos revela su sofisticación como una incuestionable alegoría de la experiencia humana”.
Como corolario, el maestro Irizarry comenta que “después que termine todo esto de Star Wars y su ‘perturbación social’, me quedará el consuelo de que el lugar más solitario del mundo es el montículo del lanzador en Yankee Stadium”.
